Mucho se ha escrito del amor, y mucho se escribirá. Todo lo que hemos sentido (las flechas de Cupido o el ahogo en la desesperanza) alguien lo ha expresado con mejores y hermosas palabras. ¿Qué mas se puede decir? Sólo quedan esas preguntas, que deben ser contestadas por nosotros mismos, con la mano en el corazón y conscientes de nuestro Ser: ¿lo/la amo? ¿me ama? ¿es el/la indicado/a? ¿persisto, o desisto?
Porque, a final de cuentas, lo único que nos llevaremos a la tumba, será nuestro corazón, y los sentimientos que alberguemos.
El amor tiene su gloria a las puertas del infierno. - Miguel de Cervantes (s. XVI-XVII)
No hay sino una clase de amor, pero hay mil copias diferentes. - La Rochefoucauld (s. XVII)
Si quisieres amar dueñas u otra mujer,
muchas cosas habrás primero de aprender;
para que ella te quiera en su amor querer,
sabe primeramente qué mujer escoger. - Juan Ruiz, Arcipreste de Hita (s. XIV)
Porque, a final de cuentas, lo único que nos llevaremos a la tumba, será nuestro corazón, y los sentimientos que alberguemos.
El amor tiene su gloria a las puertas del infierno. - Miguel de Cervantes (s. XVI-XVII)
No hay sino una clase de amor, pero hay mil copias diferentes. - La Rochefoucauld (s. XVII)
Si quisieres amar dueñas u otra mujer,
muchas cosas habrás primero de aprender;
para que ella te quiera en su amor querer,
sabe primeramente qué mujer escoger. - Juan Ruiz, Arcipreste de Hita (s. XIV)
